jueves, 22 de noviembre de 2012

ENTREVISTA A MANUEL VICENT


En la terraza del hotel Voramar.

Ayer por la tarde estuve entrevistando a Manuel Vicent para la revista Mone Monkey. Fue una experiencia apasionante. Desde aquí quiero agradecer a la revista que me diese la oportunidad de conocer a una figura literaria de su nivel, que para mí es un referente como escritor y como columnista. También quiero agradecer a Victor Aranda estas fotografías.

Si queréis leer un avance de la entrevista, lo podréis hacer en la página web de la revista Mone Monkey.







Dedicándome un ejemplar de la primera edición
de su primera novela "Pascua y naranjas".

Entregándole un ejemplar de "Catálogo de excusas..."

6 comentarios:

algo se cuece dijo...

Los que conocemos a Miguel (unos mejor que otros, ejem, ejem) sabemos que ayer fue un día especial para él... 21N, hotel Voramar, y por tener la oportunidad de "charlar" con uno de los grandes y admirados por él. Muchas felicidades por esa entrevista, por tu temple y por tu saber estar.

Miguel Torija dijo...

Gracias Laura. La verdad es que ayer fue un día muy especial para mí por muchas cosas, pero sobre todo por una que tú y yo sabemos.

Rosana dijo...

Jo, qué envidia.

Me gusta el Vicent escritor y columnista.

No me la pierdo


Abrazos!!

Miguel Torija Martí dijo...

Gracias por tu comentario Rosana. Yo también lo admiro como escritor y columnista. Por eso tuve a la vez alegría y vértigo cuando me propusieron entrevistarle.

Esta semana, sin falta, la entrevista completa.

Nos vemos en la alambrada.

Rosana dijo...

Qué sensación te dio?

Yo así con la barba ya canosa le veo aires de sabio antiguo y me gusta.

Miguel Torija dijo...

Cuando se te queda mirando con esos ojos tan azules que tiene y se pone a hablar del mito de Sísifo y a citar a Albert Camus. Tú le miras, cabeceas, y comienzas a hacerte pequeño, cada vez más pequeño y piensas por dentro y ahora que carajo le digo yo a este hombre. Espectacular su capacidad de transmitir sus ideas. Un tertuliano impresionante. Al final estuvo muy simpático. A mí me dio la misma sensación que comentas, parecía que estuvieras delante de un sabio del estilo de los de El señor de los anillos.