domingo, 8 de junio de 2025

Líneas rojas


Hay límites que no conviene superar, líneas rojas que al ser sobrepasadas nos destruyen. Conocer esos límites no suele ser difícil, un poco de sentido común es suficiente. Un ejemplo real: publicar un libro con faltas de ortografía, burdos errores gramaticales, frases sin coherencia… y hacerlo firmando la edición con el nombre de tu editorial, es lo último que debería hacer un editor.

Es inevitable que en ocasiones nos acerquemos a los márgenes peligrosamente, a veces tanto que acabamos cruzándolos. Entonces nos volvemos otros. Quizá, si somos jóvenes, inconscientes o simplemente engreídos, llegaremos a pensar que podemos mover esas fronteras y ampliar nuestros horizontes. No comprendemos que las líneas han quedado en el mismo lugar y que solo en nuestra imaginación infantil, egocéntrica o estúpida han dejado de ser rojas.

Algunas veces merece la pena cruzarlas, pero por desgracia, en el mundo mercantilizado en el que vivimos, no suelen cruzarse por motivos respetables, o al menos lícitos. Suele ser la avaricia la que empuja al otro lado de la línea.

Volviendo al ejemplo inicial, compruebo que cada vez esas fronteras se están borrando con más descaro en el mundo editorial. Sin entrar en la demencial presión a la que las editoriales someten al mercado (250 nuevos títulos se publican cada día, 90.000 al año, la mayoría de ellos prescindibles), jugar con la ilusión de un autor que confía en ti para que hagas tu trabajo de una forma medianamente profesional es inmoral. A mí, que he conocido esa ilusión, me duele. Duele por las víctimas (sobre todo cuando las conoces, las aprecias) pero también por los culpables, porque entiendo que asumen las consecuencias de haber cruzado esa línea roja.

jueves, 8 de mayo de 2025

Feria del libro 2025 (Castelló)

 


Pasé la semana pasada por la feria del libro de mi ciudad. Una feria que se sustenta sobre todo con la participación entusiasta de los autores, las editoriales y las librerías locales. Mi objetivo se limitaba a saludar a colegas, editores y libreros de la provincia. Eso que la ortodoxia llamaría pulsar un poco el ambiente literario local. Solo un poco. Muy poco. Suficiente para, como temía, corroborar una vez más que cada vez me atrae menos ese ambiente. Llega incluso a generarme empacho por un exceso de oferta, de egos.

El libro debería ser el protagonista principal de estos eventos. Parafraseando a Maradona, “el libro no se mancha”. Pero se mancha, vaya si se mancha. En demasiados casos hay poco respeto por él. He visto novedades editoriales con portadas que desmerecerían cualquier trabajo presentado en clases de primaria, libros que en los años ochenta, con un Spectrum, se podrían haber maquetado mejor, impresos en papel que parece sacado de un rollo de papel higiénico y a precios que incrementan la sensación de fraude.

Limitarse a un público provincial, incluso solo a lectores conocidos por sus autores, no debería ser un atenuante en este sentido, casi al contrario, puede ser un agravante.

viernes, 2 de mayo de 2025

La isla de las Culebras: 9 años


Han pasado 9 años desde que este hombre, este amigo, y yo dejamos muchas horas y mucha ilusión para culminar nuestra primera novela. Él como editor, yo como autor.

Hoy me ha alegrado encontrarla todavía "viva" en la feria del libro de Castelló.

La isla de las Culebras: Un hombre que duda. Una traición. El mar. La soledad. El amor.

miércoles, 23 de abril de 2025

Sant Jordi


Per als que intentem que en la nostra vida, les lletres tinguen un paper rellevant, és inevitable pensar, cada dia, en autors, en estils, en editors... En llibres. A voltes fins a un punt redundant, excessiu, malaltís.

Però un dia a l'any, Sant Jordi, avui, ens sentim menys lluny dels que ens envolten i podem compartir sense rubor les nostres inquietuds, els nostres gustos, les nostres manies literàries.


Per això, per a fer honor a este dia, en que els lletraferits deixem de ser rara avis, jo sempre procure que Sant Jordi em pille llegint, o escrivint... o almenys corregint.

viernes, 18 de abril de 2025

Talleres literarios: Wald-Michelbach






El mundo literario suele ser ingrato. Sobre todo si uno se adentra en él con pudor y compromiso con lo que escribe.

Menos mal que, de cuando en cuando, tengo la suerte de conocer a jóvenes que respetan la literatura bastante más que los que se supone que la deberían respetar.

Gracias a Cristina Somoza por dejar que, hace unos días, sus alumnos del Überwald Gymnasium de Wald-Michelbach (Alemania) conociesen los entresijos de la creación literaria y se convirtiesen por un rato en escritores.

jueves, 17 de abril de 2025

Pústulas


PÚSTULAS

Raúl Ariza nos vuelve a cautivar con su prosa envolvente e hipnótica. Logra con ella imbuirnos en atmósferas por momentos opresivas y muchas veces descorazonadoras. Los cuentos se vuelven sofocantes y desconcertantes a medida que avanzan, como si nos adentrásemos en la combinación de una sauna finlandesa y un baño turco. Una vez dentro, la elevada temperatura nos dificulta la respiración y el tupido vapor convierte en un enigma lo que nos rodea. Entonces, cuando pensamos que ya no vamos a resistir más, llega un ligero desahogo. Alguien abre la puerta y una corriente de aire frío y seco penetra para darnos un respiro y para que intuyamos qué está sucediendo a nuestro alrededor. Solo es un momento. Suficiente para que el lector no desfallezca y siga leyendo. Esa puerta que se abre suele estar representada en los relatos por un salto temporal, al pasado o al presente de los protagonistas, que permite escapar a la densidad sensorial y emocional que nos había ido atrapando. Una bombona de oxígeno que se dosifica con precisión quirúrgica. La elegante sutileza con la que Raúl nos hace viajar en el tiempo, es solo una de las evidencias del trabajo que hay detrás de cada relato, de cada párrafo, de cada frase. Construidos con la delicadeza de una pieza de orfebrería, los doce cuentos que componen Pústulas, emocionan por el trabajo y el compromiso con la literatura del autor.

El autor no necesita muchos fuegos de artificio para lograr tenernos atrapados en narraciones fluidas y evocadoras que transcurren en tres tipos de universos: relaciones familiares poco amables, ambientes criminales y cotidianeidad mundana. Solo se permite algún alarde estilístico puntual, como en “Cienfuegos”, en el que se tiene la sensación de que el autor se transmuta en un Góngora contemporáneo para contarnos el argumento de Perros callejeros o de cualquier otra película del género quinqui.

Más allá de contadas excepciones, como la anterior, las herramientas que Raúl emplea se limitan a la sinceridad de los protagonistas y a una inmisericorde narración de sus actos. Los cuentos se convierten así en una suerte de alegato final de seres torturados por sus recuerdos. El uso masivo de la primera persona, potencia la conexión del lector con unos personajes que nos muestran su epidermis llena de unas pústulas larvadas por el tiempo vivido. Para ello el narrador ha tenido que adentrarse en su interior, conocer sus sentimientos, sus deseos y a partir de ahí dejarlos libres para que pierdan el miedo a contarnos la verdad, su verdad y así dejarnos claro que solo los que pasan por la vida sin vivirla, pueden evitar que su piel se cubra de cicatrices.


Presentación:



https://www.instagram.com/reel/DIeh1dPNij_/?utm_source=ig_web_copy_link&igsh=MzRlODBiNWFlZA==

Miguel Torija presenta a Raul Ariza

domingo, 23 de febrero de 2025

ENTREVISTA EN ONDA CERO (Más de uno Guadalajara)

 Esta semana me ha entrevistado César Rivera en el programa Más de uno Guadalajara de Onda Cero.

La entrevista ha girado en torno a mi novela El espesor de un lápiz.

Agradecimiento especial a Julio Martínez por confiar en mi novela y hablarle de ella a sus compañeros de Onda Cero.